Texto | La falta de precisión de las cuestiones concretas que el recurrente pretende someter a revisión de la CSJN, la reiteración de argumentos esgrimidos en la instancia anterior, la omisión de poner en evidencia el menoscabo de los derechos al debido proceso y defensa en juicio, la insuficiente cuestión federal planteada, así como la remisión a cuestiones de hecho y prueba ya resueltas obstan a la concesión del recurso extraordinario interpuesto por el defensor del imputado. A mayor abundamiento, cabe agregar que en el escrito recursivo no queda demostrado que los hechos reprochados al imputado en la sentencia condenatoria difieran de los que le habían sido atribuidos por primera vez en la etapa de la investigación preparatoria del proceso ni tampoco la introducción oportuna de los agravios que dice haber efectuado en el expte. de casación, a lo que debe añadirse la falta de comprobación de que el daño sufrido por la parte que representa sea actual y ajeno a su propia actuación en el proceso, todo lo cual conduce a considerar sus agravios como una representación de su mera discrepancia con lo resuelto, lo cual desde luego resulta impropio para abrir la instancia del remedio federal que pretende. |